Los carriles se fabrican con el mismo material que los portafiltros o las viseras, se realizan a base de una combinación de polímeros con los que se consigue un plástico de alta resistencia al impacto y estable a altas y bajas temperaturas.
Los carriles se encargan de la sujeción directa de los filtros a través de sus ranuras, en ellas podremos fijar un filtro como el ND o deslizar cualquiera de los degradados para un filtrado más preciso.
Estos carriles van sujetos al portafiltros y su anclaje es mi rápido y sencillo, sin tornillería (ver imagen):
Existen diferentes ranuras intercambiables para el “Sistema 100mm de Lucroit” dependiendo de lo que necesitemos en cada momento: